El presente ensayo resalta la importancia de promover estilos de vida saludable en la clase Educación Física como una de las principales experiencias en que el entorno educativo puede fomentar buenos hábitos entre los estudiantes. La clase de Educación Física favorable es aquella que proporciona oportunidades para la actividad física regular, enseña habilidades y conocimientos relevantes sobre la actividad física y la nutrición, y fomenta actitudes positivas hacia un estilo de vida saludable. Este último, a su vez, incluye una variedad de comportamientos y elecciones que pueden influir en la salud física, emocional y social del educando, lo cual incluye la actividad física regular; una dieta equilibrada y variada; y la prevención del estrés, la depresión y la ansiedad. La clase constituye un ambiente propicio para estimular comportamientos y elecciones saludables. En ella, se pueden implementar estrategias que impulsen la actividad física regular y la educación en nutrición como, por ejemplo, la realización de juegos que involucren el movimiento y la enseñanza de habilidades y conocimientos en nutrición. La favorabilidad de la clase de Educación Física también puede ser medida por su capacidad para desplegar actitudes positivas hacia un estilo de vida saludable. Para ello, los estudiantes pueden aprender sobre la importancia del bienestar físico y emocional, desarrollar habilidades para establecer metas y llevar un estilo de vida saludable a largo plazo y experimentar la sensación de logro y confianza que viene con el éxito en la actividad física y en la adopción de hábitos saludables.