Estamos en presencia de la cuarta era industrial, por la magnitud de los usos que se le da a la inteligencia artificial, considerada como una herramienta fundamental para el progreso y transformación, Estamos en medio de un océano vasto, desconocido y sin normas, que implica el cambio del sistema legal, pues la Inteligencia Artificial (IA), si se usa de manera indiscriminada, puede generar vulneración y sesgos, por la cantidad de procesos neuronales que estudia y analiza con el fin de emular conductas humanas. La incorporación de la tecnología en las distintas áreas del conocimiento, ha marcado un antes y un después, así como una evolución digna de la ciencia ficción de los programas informáticos que la componen, ya que cada día, con el uso que se les da, esta se alimenta y maneja nuevos datos, procesando la Big Data de forma rápida y sencilla. En este ensayo reflexionamos en relación con la necesidad de replantearse la concepción de teorías jurídicas existentes, que han permitido por años regular las conductas del hombre en sociedad, con el fin de vivir de forma armónica y justa. Los principios, reglas, procesos y leyes existentes no están a la par de los cambios exponenciales que provee la tecnología, ya que los casos que se han presentado se han trabajado con una estructura jurídica no adaptada a este nuevo paradigma digital. La intención es generar conciencia de la necesidad de actualización y regulación del uso de la tecnología para que la ciencia jurídica entre en la revolución 4.0. Palabras clave: Revolución 4.0 , inteligencia Artificial , tecnología, Derecho